Displasia de cadera Traumatología y ortopedia en el perro y en el gato
La relación de la cabeza femoral con el acetábulo, ha de ser congruente, en un Angulo correcto, y el movimiento de la articulación ha de estar dentro de unos parámetros y ángulos (ángulo de Norgberg). Hay razas sobre todo las de mayor tamaño, que tienen una predisposición anatómica, y que heredan dicha enfermedad. La displasia puede ser incapacitante, o simplemente tenerla y la articulación se adecua al problema, se produce lo que entendemos por plasticidad de adaptación. (Mastines, molosos en general). Hay razas que tienen una mayor predisposición, Pastor Alemán, Golden Retreiver, Labrador etc. Hay otras razas que difícilmente la tienen, Setter, galgos perros de caza en general. Las razas pequeñas y medianas no suelen tener displasia, aunque diagnosticamos displasias en perros miniatura, en razas medianas, hay razas con cierta predisposición cocker, buldog, carlino etc. El gato aunque raro puede tenerla, y hemos encontrado algunos casos. Actualmente la genética la herencia etc., están en periodo de discusión, y los nuevos hallazgos sitúan a la Displasia de cadera en una patología, con predisposición genética y que se desarrolla o no en el crecimiento del animal. El tratamiento con diagnostico precoz, pasa por una buena higiene alimenticia, ejercicio y reforzar las articulaciones. Por precoz entendemos antes de los cuatro meses. El tratamiento a partir de los cuatro meses, variara mucho dependiendo del grado de dolor, de limitaciones funcionales, y del grado de displasia. Ver:
1 - No modificar a ser posible la articulación. 2 - Evitar al máximo la cirugía agresiva . 3 - Sólo en casos sin posibilidades 1-2, recurrir a técnicas sustitutorias. Ver: • Cuando le cuesta levantarse. • Cuando corre con las patas juntas (canguro). • La posición de las patas traseras, es en X. • Anda de una forma vacilante, ladeando las caderas. • No quiere subir ni bajar escaleras. • Rechaza el contacto con otros perros.
|