Monografía: Fijación Externa por Dr. Alexandre Tarragó.

Monografía: Fijación Externa por Dr. Alexandre Tarragó

 

Capítulo 8

ARTRODESIS

 

8.5 PUENTES ARTICULARES

8.5.2 Puente sobre la rodilla

Aún no siendo una técnica muy utilizada puede sernos de gran ayuda como técnica complementaria en lesiones graves multifragmentarias, así como para realizar artrodesis.

Indicaciones:
Haremos uso de esta técnica en los casos siguientes:
• Lesiones abiertas graves con perdida de sustancia por abrasión.
• Lesiones graves de distensión ligamentosa múltiple.

Técnica de aplicación

En este caso montaremos un cuadro trasfixiante sobre la tibia, una o dos agujas sobre los cóndilos y zona metafisaria del fémur y dos o tres agujas hemifijantes sobre la cara lateral del fémur. En este caso la barra externa es única y lo que haremos es doblarla a la altura de la articulación de la rodilla. En la cara medial colocaremos una barra que ira de las dos agujas transfixiantes de la porción distal del fémur hasta la tibia, la cual también curvaremos a la altura de la articulación de la rodilla. La agujas hemifijantes es aconsejable que sean roscadas y a ser posible con rosca positiva.

 

8.5.3 Puente radio carpiano

El fijación externa en la articulación radio carpiana, es la técnica de elección para estabilizar esta articulación durante un periodo prolongado. Puede aplicarse sola o bien puede complementarse con cirugía reparadora de ligamentos.

Indicaciones:
• Lesiones ligamentosas: repararemos los ligamentos y colocaremos el fijador externo de Meynard durante tres semanas.
• Lesiones por abrasión: trataremos estas como cualquier lesión abierta realizando una limpieza exhaustiva así como reparando las estructuras ligamentosas. En este caso la fijación externa nos permite la estabilidad de la articulación, en una zona donde la cicatrización bajo tensiones o movimientos de flexión nos daría problemas, y además tenemos un buen acceso a la zona para curar.
• Luxación del hueso carporadial: reduciremos este mediante una aguja que se continuará hacia el hueso carpocubital. Luego montaremos un fijador puente entre el radio y metacarpianos uniendo la aguja del carporadial a las barras del montaje. Este montaje lo mantendremos durante tres semanas.
• Hiperextensión del carpo: el tipo de lesiones que pueden aparecer antes una hiperextensión carpiana son muy diversas, encontrándonos entre ellas los desgarros de los pequeños ligamentos intercarpianos por la cara ventral, así como la rotura del ligamento que va desde el accesorio hasta los metacarpianos. También puede haber lesiones de los ligamentos colaterales. Para ello realizaremos radiografía en estrés de la articulación afectada cuando el animal este sedado. En el caso que optemos por la sutura estable del ligamento plantares podemos hacer uso de este fijador como medida de soporte que lo dejaremos durante cuatro o cinco semanas.
• Fracturas articulares: las fracturas que afectan a la cabeza del radio son de difícil resolución, por lo cual el uso de un puente radio carpo-metacarpiano colocado en distracción (artrodiastasis) puede disminuirnos las cargas sobre el foco de fractura, hasta que este haya osificado.
• Fracturas carpianas: de igual manera a lo anteriormente descrito las fracturas carpianas pueden solventarse si trasmitimos mediante un puente las cargas desde el radio a los metacarpianos.

Técnica de aplicación

El puente radio carpiano está compuesto por un gran cuadro el cual tendrá de dos a tres agujas en el radio, según el peso de los animales, y de dos a tres agujas en la zona carpo-metacarpo.
Las agujas dístales se situarán preferentemente en las siguientes localizaciones:
• Primera línea carpiana
• Metafisis proximal de los cuatro metacarpianos.
• Tercio o cuarto distal de la diáfisis de los metacarpianos centrales; o sea el III y IV.
• Evitaremos la segunda línea carpal

La barra que unirá las agujas del radio y de la zona carpiana será única y en caso necesario puede dársele, en determinados animales, una curvatura natural de alrededor 160º. Esta curvatura la podemos valorar en la extremidad opuesta.

 

 

Para las inestabilidades de la articulación tibio-tarsal la fijación externa es una buena técnica. La causa más frecuente que ocasiona lesiones abrasivas y luxaciones en esta área, son los accidentes automovilísticos que atrapan la extremidad bajo el neumático.
En estas ocasiones no es aconsejable colocar material de osteosíntesis en el lugar de la lesión abierta, es por este motivo que el uso de los fijadores externos que puentean esta zona serán de gran uso. La colocación de estos nos permitirá tener un buen acceso a la herida y poder aplicar medidas para la correcta cicatrización.

Indicaciones:
• Luxaciones tibio-tarsales importantes.
• Luxaciones abiertas de segundo o tercer grado
• Lesiones abrasivas con inestabilidad
• Fracturas conminutivas graves del pilón tibial
• Neutralización complementaria de una artrodesis quirúrgica.

Principios de aplicación.

Dado que, como hemos comentado, estas lesiones suelen ir acompañadas de lesiones de los tejidos blandos hay que realizar:
• Correcto examen de las estructuras vásculo-nerviosas
• Control y prevención de la infección.
• Estabilizar el tejido óseo para la correcta cicatrización.

Es importante que en caso de que el animal presente herida desgarrante o abrasiva sobre la piel, esta sea correctamente rasurada, realizar desbridamiento quirúrgico, (en caso que sea necesario) y aplicar algún tipo de apósito con desinfectante, lo antes posible, a hasta que tomemos una decisión de que técnica quirúrgica vamos a utilizar.

Realización de la técnica

El montaje que habitualmente utilizamos en esta zona e, es el de un cuadro sobre la tibia solidarizado a uno montado en la zona tarso-metatarso y que abordaremos por la zona medial.
Existen varios tipos de montajes y vamos a utilizar unos o otros en función del peso del animal.

Cuadro tibial:
Compuesto por dos o tres agujas según sea el peso del animal.
• La primera aguja ira colocada en el cuarto proximal de la tibia
• La segunda, ira próxima a la articulación, a una distancia prudencial para permitir la unión de las dos barras de cada uno de los cuadros.
• En caso de un animal pesado colocaremos una aguja entre medio de las dos antes mencionadas.

Cuadro tarso-metatarsiano:
También, compuesto de dos o tres agujas según sea el peso del animal.
• No colocaremos ninguna aguja en la prolongación del eje tibial para no interferir con la unión de las dos barras.
• También hay que tener en cuenta la presencia de heridas, por la cual cosa, para la colocación de las agujas, tendremos en cuenta este aspecto.
• Evitaremos de pasar agujas allí donde haya una lesión abierta.
• La primera aguja la colocaremos en el extremo caudal del calcáneo
• La segunda, preferentemente la colocaremos en las metafisis de los cuatro metatarsianos.
• La tercera aguja la podemos colocar en dos lugares diferentes:
  - En la segunda línea de huesos tarsianos
  - A través de la base del astrágalo o del calcáneo.
• En caso necesario, en un animal de gran peso siempre podemos colocar una última aguja en los extremos del III ó IV metatarsiano. Hemos de tener en cuenta que el diámetro de los huesos aquí es muy pequeño y por este motivo tendremos que colocar una aguja acorde con el diámetro del hueso.

 

Esquema colocación agujas del cuadro tarso metatarso

 

Estabilización de los cuadros.

La unión de los dos cuadros se hará respetando las angulaciones de apoyo fisiológico según sea, un perro 135º-145º o bien un gato 125º-135º. Uniremos las barras de un cuadro con las del otro cuadro, nunca apoyándonos sobre una aguja. Para asegurar la estabilidad de este montaje hemos de añadir una segunda barra entre los dos cuadros, que podemos colocar caudal o cranealmente a la tibia. En los perros grandes podemos colocar las dos barras.

La duración del montaje ira en función del motivo que lo hayamos colocado, siendo no superior a aproximadamente de tres semanas en las inestabilidades, y de seis a ocho semanas en las artrodesis.

 

Esquema unión de las barras

 

El puente que acabamos de mencionar también lo podemos utilizar en caso de rotura del tendón de Aquiles. Tras la sutura de este colocaremos un fijador externo para la estabilización de esta articulación y de esta manera el tendón no estará sometido a fuerzas durante el periodo de cicatrización.
Mantendremos una ligera hiperextensión durante los primeros 15 ó 20 días. Luego cerramos la articulación unos 15º grados y lo mantenemos así durante 10 días. Finalmente repetiremos la anterior maniobra durante el mismo número de días.

 

Esquema de los diferentes montajes sobre la articulación tibio-taso-metatarsiana.